Reflejos, una buena opción para tu pelo
Si quieres darle un toque de color o algo diferente a tu look, los reflejos o destellos son una excelente alternativa. Son ideales para no “comprometerte” con un solo tono ni tener que ir corriendo a la peluquería cada mes a retocarte las raíces o hacerte la tintura completa. Esto no quiere decir que nos haremos los reflejos una sola vez y nos olvidaremos del asunto, sino que algunos cuidados son menos “urgentes”.
Utiliza productos específicos para tu cabello teñido con reflejos, para que se vea más saludable, sedoso y brilloso. De lo contrario, el tono irá desapareciendo, y hasta te puede pasar que lo veas un tanto “verdoso”. Puede ocurrir también que el cabello se debilite y se abra por el efecto de la tintura.
Es muy importante elegir el tipo de destello o reflejo que usarás, porque no todos quedan bien con cualquier estilo y personalidad. Lo ideal es teñir el pelo de dos tonos más claros que el resto, como mucho, para que parezca más natural y no tengamos que preocuparnos tanto si por algunas semanas no se “arreglan” las raíces.
Consejos para cuidar el cabello teñido con reflejos
Ten cuidado con la exposición a los rayos UV, porque no sólo debilita el cabello, sino que también va quitando el color de los reflejos.
Para lavarlo, primero moja con agua tibia y usa shampoo creado para el tipo de pelo que tienes. Casi todas las marcas importantes cuentan con un producto para reflejos. Luego, enjuágalo con agua fría para sellar las hebras.
Si notas que el tono de tus mechitas está muy amarillo, utiliza un shampoo y acondicionador que añada color a tu pelo. Además, que ofrezcan brillo a la melena y un color más “caramelo”, para eliminar el amarillento.
Evita aquellos productos que prometan aclarar el cabello, porque conseguirás que los reflejos desaparezcan más rápidamente.
Antes de ir a la playa o la piscina en verano, utiliza un producto protector para el sol, el cloro y el agua salada. No olvides el gorro o pañuelo para cubrirlo del viento y la arena.
Aplica una mascarilla una vez a la semana, y cuando te laves, utiliza gotitas, aceites o sueros, algo que te ayude a mantenerlo siempre brillante y suave. Algunos tratamientos sólo se colocan por debajo de las orejas hasta las puntas.
Elige un peine de dientes anchos en lugar de cepillo, para evitar que el cabello se caiga. Primero desenreda las puntas.
Dile adiós a la secadora de pelo, salvo que sea muy necesario, como antes de ir a una fiesta o salir a la calle. El calor hace que el teñido del pelo se vaya más rápido.
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